
Sin llegar a una paliza pública en una plaza o un restaurante (fantasía de mucha gente) puede darse alguna nalgada ocasional en la calle o u otro lugar y, lo más increíble del asunto es que a todo el mundo (spanko o no) le parecerá gracioso.
¿Qué spankee no anda tentando la suerte cuando anda por lugares públicos? Se sabe que eso en cierta forma nos protege porque nuestro spanker no nos va a poner sobre las rodillas ahí mismo. A lo sumo nos susurrará al oído que eso puede pasar cuando lleguemos a casa. Mientras tanto uno aprovecha la libertad de dilatar ese momento que es uno de los más excitantes (con amenaza incluída).
Recuerdo andar abrazados con Patricio por una calle cualquiera, llena de gente desconocida y probar si reaccionaría o no. La mayoría de las veces, para mi sorpresa, me descubrí recibiendo un chirlo (en el mejor de los casos) y acto seguido no saber qué cara poner. Porque esa es la cuestión, él hace lo que quiere hacer y sigue caminando como si nada pero nosotras/os? Uno se siente expuesto como si toda esa gente de pronto sospechara que eso que sucedió sucede siempre. Incluso se insinúa alguna sonrisa por ahí.
En la gran mayoría de los casos se sabe que el ruido de la calle, lo ensimismada que va la gente y todo eso evita que nadie casi note el gesto. Pero me ha pasado esto mismo en un lugar cerrado, una galería o un shopping, no tanta gente, demasiada acústica y PAFFFFFFF... (el eco se repite y parece no terminar nunca) Ahí sí, uno ve cómo todos automáticamente giran y observan mientras una hace un esfuerzo por esconder el rubor y poner cara de sea lo que sea que pasó no me pasó a mi. Pero es inútil.
Cada vez (sino siempre al menos el 80% de las veces) que salimos del edificio Patricio me da un chirlo en el hall de entrada, después de salir del ascensor. El sonido hace el mismo efecto y da la sensación de oírse en todo el edificio. A esta altura yo creo que el encargado efectivamente sospecha algo, pero sería una ingenuidad pensar que es debido a ese gesto sino más bien a todos los otros sonidos que salen de la intimidad de nuestro departamento.
¿Alguna vez intentaron subir una escalera un paso adelante de un spanker? Pruébenlo y después me cuentan si hay alguna manera de evitar el chirlo.
Por último los gestos más intensos no son necesariamente físicos. Una amenaza en el oído ("¿Estás aprovechando que hay gente para portarte así?") o peor aún un reto casual en frente de todos.. claro que la gente no va a sospechar cuánto o qué significa para nosotros, pero el hecho sucede.
Estábamos con unos amigos jugando a las cartas.. no es que yo quisiera hacer trampa, pero (sin querer) quise deshacer una jugada que no favorecía a mi equipo. Patricio me pegó un grito y encima tuve el tupé de ofenderme porque no me la dejó pasar. Igualmente, que yo sepa, a nadie le gusta perder.. O me equivoco?
Comentarios
Doy fe de todo lo que dijiste, sobre todo que es imposible subir la escalera delante de un spanker sin recibir un chirlo, dan ganas de decir, primero Ud....jejeje!!!.
Y sobre todo a mi ni a nadie le gusta perder.
Un besote.
Gra.
Jeje. En realidad no sé a quién le gusta más este juego. Y hablando de ganar y perder, no nos gusta a ninguno pero obviamente nosotras perdemos más seguido.. ;)